lunes, 30 de mayo de 2011

Obsesión pero no a cualquier precio

Obsesión pero no a cualquier precio


Era 29 de mayo y el tiempo del calendario le había ganado la batalla a mi bolsillo para generarme una encrucijada: tengo 60 pesos y una novia con la que quiero pernoctar porque en mi casa, y con mis conservadores padres dando vueltas, tiene la estadía prohibida.

Con estas condiciones, mi rol de blogero se convirtió en el de un periodista de investigación que en vez de buscar una noticia, indaga por todos los medios un lugar donde satisfacer sus necesidades.

Después de una ardua averiguación, que incluyó el llamado a amigos que me tildaron xenófobamente de “rata” y “judío”, encontré el albergue transitorio que tanto auguraba: Obsession.

Ubicado en Ramón Falcón 3065, en pleno barrio de Flores, a metros de Mansion Doree, Obsession es el lugar indicado cuando la plata escasea y las ganas de dormir con alguien abundan: es económico, de fácil acceso y tiene pernocte sin cargo.

En una zona rodeada por trabajoras sexuales, el telo aparece con luces rojas y una fachada nada pretenciosa, que invita a entrar al necesitado tanto como expulsa al acaudalado, que con seguridad nunca visitará este lugar.

Las habitaciones comunes valen entre 52 y 62 pesos, están pintadas con simpleza y, teniendo en cuenta la relación precio-calidad, no hay mucho para criticarles más allá de su austeridad.

Las suites, en cambio, cuestan entre 69 y 80, el precio de las habitaciones standard en otro hotel, pero tienen más servicios y están en mejor estado, con detalles y comodidades como hidromasajes y jacuzzi.

Si querés pagar 10% menos, quedarte una hora más o desayunar gratis entrá acá e imprimí tu descuento.

Obsession vale la pena cuando la billetera está flaca y el hambre es grande. Por eso TeloRecomiendoYo

1 comentario:

  1. Genial, genial! Buena recomendación para los fines de mes! Gracias!!

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